Cómo elegir el socio indicado
Un socio puede ser una persona con la cual nos aventuremos en la creación y desarrollo de un negocio, pero también, puede ser otro negocio o empresa con la cuál podemos crear una alianza estratégica.
El contar con un socio, puede traernos grandes beneficios o ventajas, tales como la posibilidad de contar con un mayor capital, poder combinar recursos, o poder repartir funciones y responsabilidades.
Pero también, puede traernos muchos problemas, tales como disputas, conflictos o desacuerdos.
Por lo que siempre que decidamos contar con algún socio, debemos tomarnos nuestro tiempo, y analizar bien si es que nos vamos a asociar con el socio correcto.
Veamos a continuación algunas recomendaciones que nos pueden ayudar a elegir al socio indicado:
Mismas aspiraciones
Debemos buscar un socio que tenga las mismas aspiraciones de crecimiento que nosotros, que tenga los mismos objetivos, y que esté tan motivado y comprometido como nosotros, para poder alcanzar dichos objetivos.
El contar con un socio con las mismas aspiraciones, nos asegura que cuando surjan los primeros obstáculos, siga manteniendo la motivación y el entusiasmo, y no se retire ante el primer inconveniente.
Mismo tamaño
Es preferible buscar un socio que tenga el mismo tamaño que nosotros, es decir, que cuente con condiciones financieras similares a la nuestra, o que cuente con un negocio en un nivel de desarrollo parecido al nuestro.
Por ejemplo, si recién hemos empezado nuestro negocio, es preferible buscar un socio que también haya empezado hace poco, y no un negocio grande y con tiempo en el mercado, que se podría deshacer de nosotros en cualquier momento.
Que aporte recursos en cantidades iguales
Para evitar futuros conflictos, es preferible contar con un socio que aporte la misma cantidad de recursos (ya sean financieros o de otro tipo) que nosotros.
La idea es que posteriormente alguno de los socios no llegue a tener la sensación de que está trabajando más y que, a pesar de ello, obtiene menos ingresos que el otro.
Que aporte recursos complementarios
Debemos buscar un socio que no solo aporte recursos en la misma proporción que nosotros, sino que los recursos que aporte sean complementarios a los nuestros.
Por ejemplo, puede ser experto en algún aspecto del negocio que nosotros no dominemos bien, o podría aportar recursos que nosotros no tengamos, tales como contactos comerciales, experiencia en el tipo de negocio, conocimiento del mercado objetivo, etc.
Que inspire confianza
Y, por último, la recomendación más importante consiste en buscar un socio que nos inspire confianza.
Si desde el principio de la relación, no cumple sus promesas (por más pequeñas que sean), dice mentiras (igualmente, por más pequeñas que sean), llega constantemente tarde a las reuniones, se contradice constantemente, cambia rápidamente de opinión, comete errores frecuentes, o simplemente no nos inspira confianza; debemos inmediatamente dar media vuelta, y buscar un nuevo socio.