¿Qué es un producto? (definición, tipos y componentes)
Un producto es un bien o servicio que una empresa ofrece o vende a los consumidores para que puedan satisfacer sus necesidades o deseos. Cuando un producto es un bien es un conjunto de tangibles, pero con algunos elementos intangibles, y cuando es un servicio es un conjunto de intangibles, pero con algunos elementos tangibles.
Un producto también es, desde el punto de vista del marketing, uno de los cuatro elementos que conforman la mezcla de marketing, junto con el precio, la distribución, y la promoción.
En este artículo te decimos qué es un producto, cuáles son los tipos de productos que existen, y cuáles son los componentes de un producto.
En este artículo encontrarás:
¿Qué es un producto?
Un producto es un bien o servicio que una empresa ofrece o vende a los consumidores para que puedan satisfacer sus necesidades o deseos.
Cuando un producto es un bien está conformado por elementos tangibles tales como el núcleo material, el envase, el empaque, el etiquetado, etc.; pero también incluye elementos intangibles tales como el servicio al cliente, las garantías, la marca, etc.
Algunos ejemplos son los alimentos, la ropa, los relojes, los perfumes, los electrodomésticos, los muebles, los automóviles, etc.
Mientras que cuando un producto es un servicio está conformado elementos intangibles tales como desempeños, esfuerzos, atenciones, etc.; pero también incluye elementos tangibles tales como, por ejemplo, en el caso de un restaurante, los alimentos, las bebidas, los muebles, etc.
Algunos ejemplos son los servicios de asesoría, de educación, de salud, de transporte, de turismo, de reparación, etc.
Aunque, tal como hemos visto, un servicio es en realidad un producto, usualmente se utiliza el término productos y servicios para hacer referencia a los bienes y servicios.
Tipos de productos
Los productos se pueden clasificar en diferentes tipos, pero principalmente se clasifican según su durabilidad, la forma en que se compran, y el uso que se les da.
Según su durabilidad los productos se clasifican en productos duraderos y productos no duraderos:
- Productos duraderos: son aquellos que pueden ser utilizados varias veces o durante un largo periodo de tiempo. Algunos ejemplos son los electrodomésticos, los muebles y los automóviles.
- Productos no duraderos: son aquellos que solo pueden ser utilizados una vez o que se consumen en poco tiempo. Algunos ejemplos son los alimentos, los productos de cuidado personal y los productos de limpieza.
Según la forma en que se compran, los productos se clasifican en productos de conveniencia y productos de comparación:
- Productos de conveniencia: aquellos que los consumidores compran regularmente y sin mayor planificación. Algunos ejemplos son los alimentos, los productos de cuidado personal y los productos de limpieza.
- Productos de comparación: aquellos que los consumidores investigan y comparan antes de tomar la decisión de comprarlos. Algunos ejemplos son la ropa, los teléfonos móviles y los automóviles.
Según el uso que les dé, los productos se clasifican en productos de consumo y productos industriales:
- Productos de consumo: son aquellos que los consumidores finales compran o adquieren para su consumo o uso personal. Algunos ejemplos son los alimentos, la ropa y los automóviles.
- Productos industriales: son aquellos que las empresas o personas compran o adquieren para utilizarlos o venderlos en sus negocios. Algunos ejemplos son las materias primas, los insumos y los equipos de fábrica.
Algo a tener en cuenta es que un mismo producto puede ser un producto de consumo y un producto industrial; por ejemplo, si un consumidor compra un mueble para colocarlo en su sala, el mueble será considerado un producto de consumo, pero si lo adquiere para ponerlo en su negocio o venderlo en su tienda de muebles, entonces será un producto industrial.
Una línea de productos es un grupo o tipo de productos de una empresa que están estrechamente relacionados entre sí; por ejemplo, al funcionar de manera similar o tener la misma utilidad.
Componentes de un producto
Un producto está conformado principalmente por el producto intrínseco y los insumos que lo conforman; por ejemplo, la pasta dental antes de ser introducida en su tubo dental, el jabón antes de ser introducido en su empaque, o el agua mineral antes de ser introducida en su botella.
Pero además del producto intrínseco y los insumos que lo conforman, un producto está conformado por diferentes elementos, tanto tangibles como intangibles, que contribuyen con darle valor, y que se deben tomar en cuenta al momento de desarrollarlo, tomar decisiones sobre este o formular estrategias para este.
Veamos a continuación cuáles son los principales componentes de un producto:
Las características
Las características son los atributos, cualidades o propiedades que se le agregan al producto intrínseco, y que permiten identificarlo y diferenciarlo de los demás productos que existen en el mercado.
En el caso de un bien las características suelen incluir las funciones, la forma, la textura, el color, el sabor, el olor, el peso, el tamaño y otras especificaciones técnicas.
Mientras que en el caso de un servicio las características suelen incluir la rapidez, la eficiencia y la eficacia del servicio; pero también las características de los elementos tangibles que lo conforman.
El estilo
En el caso de un bien el estilo hace referencia a la forma, apariencia o aspecto físico; mientras que en el caso de un servicio hace referencia a la forma en que este es realizado.
El estilo permite relacionar el producto con el concepto, la esencia o la personalidad de la empresa, y básicamente es lo que determina que el producto tenga o no un aspecto atractivo.
El diseño
En el caso de un bien el diseño hace referencia a su funcionabilidad o uso; mientras que en el caso de un servicio, además de su funcionabilidad o uso, hace referencia también a la atención brindada.
El diseño de un producto es lo que determina que este pueda cumplir eficientemente las funciones para las cuales fue creado, o que pueda ser fácilmente utilizado y, por tanto, es lo que determina en gran medida que satisfaga o no las necesidades o deseos de los consumidores.
La calidad
La calidad es el conjunto de características y propiedades de un producto que le confieren capacidad de satisfacer necesidades, gustos y preferencias, y de cumplir con expectativas en el consumidor.
En general, podemos decir que un producto es de buena calidad cuando está hecho de insumos de primera, tiene un aspecto atractivo, funciona eficientemente, y está acompañado de un buen servicio al cliente.
Mientras mayor sea la calidad de un producto, mayores probabilidades habrá de que los consumidores lo compren o adquieran; pero también, por lo general, mayor será su costo.
La marca
La marca es un nombre, término, signo, símbolo, diseño o una combinación de estos que se le asigna a un producto para poder identificarlo y diferenciarlo de los demás productos que existen en el mercado.
Además de permitir identificar y diferenciar un producto, una buena marca permite transmitir su concepto, estilo o personalidad, realzar la publicidad, y fidelizar al cliente.
Para elegir una buena marca se debe elegir un nombre atractivo, preferiblemente corto y fácil de pronunciar, que sea acorde con la esencia del negocio, y que sea capaz de diferenciar o distinguir el producto de los demás productos de la competencia.
El empaque
El empaque es el recipiente o la envoltura de un producto que tiene la finalidad de contener, envolver y proteger el núcleo del producto, así como facilitar su manipulación, transporte y almacenamiento.
Además de permitir contener, envolver y proteger el núcleo del producto, y facilitar su manipulación, transporte y almacenamiento, un buen empaque permite hacer más atractivo el producto, diferenciarlo de los demás productos de la competencia, y hacerle publicidad adicional.
Un buen empaque es aquél que provee información importante del producto, facilita o simplifica su uso, traslado y almacenamiento, es atractivo y capta la atención del consumidor en el punto de venta, y es capaz de diferenciarse de los empaques de los productos de la competencia.
Los servicios adicionales
Los servicios adicionales o servicios de apoyo son aquellos servicios que se proveen junto con el producto, generalmente sin que el consumidor los espere o los solicite, y que le agregan un mayor valor y disfrute.
Los servicios adicionales incluyen la entrega del producto a domicilio, la instalación del producto, la asesoría o capacitación en el uso del producto, el servicio técnico o de mantenimiento, las garantías, las políticas de devoluciones, y otros servicios de postventa.
Un buen servicio adicional puede hacer la diferencia entre un consumidor que vuelve a comprar el producto y lo recomienda con otros consumidores, y un consumidor que no vuelve a mostrar interés por este.