¿Qué es publicidad? (definición, tipos y consejos)

Desde anuncios que vemos cada vez que navegamos por Internet o utilizamos las aplicaciones de nuestros móviles, hasta paneles publicitarios que vemos cada vez que salimos a hacer nuestras compras o viajamos en automóvil, la publicidad está presente en todos lados.

La publicidad les permite a las empresas llegar a una audiencia amplia y diversa, informar a los consumidores sobre sus productos, persuadirlos de que los compren o utilicen, construir la imagen de su marca, y mejorar su reputación y relación con el público.

Sin embargo, la publicidad también presenta algunas desventajas para las empresas ya que puede resultar molesta para los consumidores, lo cual puede hacer que sientan rechazo hacia sus productos y eviten comprarlos y, en algunos casos, puede resultar costosa.

La publicidad es una de las técnicas de promoción más efectivas a la hora de promocionar o comunicar un producto o servicio, pero por otro lado una de las más costosas.

En este artículo te decimos qué es la publicidad, cómo hacer publicidad paso a paso, cuáles son los tipos de publicidad que existen, y 10 consejos para una publicidad efectiva.

¿Qué es la publicidad?

La publicidad es una técnica de promoción o comunicación que consiste en dar a conocer, informar y hacer recordar un producto, servicio o marca, así como en persuadir, estimular o motivar su compra, consumo o uso, a través de una comunicación y medios impersonales; es decir, a través de una comunicación y medios que van dirigidos a varias personas a la vez.

La publicidad es también uno de los elementos que conforman la mezcla de promoción o comunicación, siendo uno de los más efectivos, pero también uno de los más costosos, a la hora de promocionar o comunicar un producto o servicio.

Muchas personas consideran que la publicidad y la promoción son lo mismo, pero lo cierto es que tienen significados distintos: ambas son actividades destinadas a dar a conocer, informar, persuadir su compra y hacer recodar un producto, pero la diferencia es que la publicidad es una forma que promoción que está dirigida a varias personas a la vez, a diferencia de otras formas de promoción como la venta directa o el merchandising que utilizan medios más personales.

Para entender mejor el concepto de la publicidad, veamos a continuación cuáles son los elementos que la componen:

Emisor

El emisor es el encargado de definir los objetivos, los medios y los mensajes publicitarios que serán enviados al receptor (público objetivo). El emisor está conformado por la empresa que publicita un producto o servicio.

Objetivo publicitario

El objetivo publicitario es el objetivo que se pretende alcanzar a través de la publicidad. Ejemplos de objetivos publicitarios son: dar a conocer la existencia de un producto, informar sobre sus principales características, persuadir su compra y hacer recordar su existencia.

Medio publicitario

El medio publicitario es el medio o canal a través del cual se envía el mensaje publicitario al receptor. Ejemplos de medios publicitarios son la televisión, la radio, los diarios, el Internet, el correo postal, los paneles y las vallas publicitarias.

Mensaje publicitario

El mensaje publicitario es el mensaje que se envía al receptor a través de los medios o canales publicitarios con el fin de dar a conocer, informar o hacer recordar un producto o servicio, o persuadir su compra, consumo o uso. Un ejemplo de mensaje publicitario es un anuncio o aviso publicado en el diario.

Receptor

El receptor es quien recibe el mensaje publicitario a través de los medios o canales publicitarios. El receptor está conformado por el público objetivo.

ícono idea

Publicidad no es lo mismo que propaganda. Mientras que la publicidad busca persuadir a los consumidores para que compren o utilicen un producto o servicio, la propaganda busca influir en las personas para que adopten una idea o causa.

¿Cómo hacer publicidad?

No existe una regla que determine cómo hacer publicidad, pero en general, para hacer publicidad se suelen seguir los siguientes pasos.

1. Establecer objetivos publicitarios

El primer paso para hacer publicidad consiste en establecer los objetivos publicitarios; es decir, los objetivos que se intentarán alcanzar a través de la publicidad.

Los objetivos publicitarios suelen estar relacionados con:

  • crear intriga sobre el lanzamiento de un nuevo producto.
  • dar a conocer un nuevo producto.
  • informar sobre las características de un producto.
  • resaltar los principales beneficios o atributos de un producto.
  • posicionar una marca o un lema publicitario.
  • persuadir, estimular o motivar la compra, consumo o uso de un producto.
  • incentivar la afluencia de público en un local.
  • hacer recordar la existencia de un producto.

2. Definir público objetivo

Una vez que se han establecido los objetivos publicitarios, el siguiente paso consiste en definir el público objetivo; es decir, el público al cual irá dirigida la publicidad.

La razón de definir el público objetivo es que no todos los públicos tienen acceso a los mismos medios publicitarios ni reaccionan por igual ante el mismo mensaje, por lo que al definir claramente el público objetivo, es posible ser más eficientes a la hora de diseñar las estrategias publicitarias.

3. Analizar público objetivo

Una vez que se ha definido el público objetivo, se procede a analizarlo y señalar las principales características que posea y que puedan servir a la hora de seleccionar los medios publicitarios adecuados, redactar un mensaje publicitario efectivo, y diseñar otras estrategias publicitarias.

Por ejemplo, en el análisis del público objetivo se podría señalar dónde vive, cuál es su rango de edad, cuál es su nivel de ingresos, cuál es su nivel de educación, qué medios de comunicación escucha o lee, dónde suele comprar el tipo producto, cada cuánto tiempo lo compra, cómo lo usa, cuáles son sus costumbres, cuáles son sus hobbies, etc.

4. Determinar presupuesto publicitario

Una vez que se ha analizado el público objetivo, se procede a determinar el presupuesto publicitario; es decir, la cantidad de dinero que se está dispuesto a invertir en la publicidad.

Determinar un presupuesto publicitario puede depender de varios factores tales como la industria, el mercado, la competencia, los objetivos publicitarios, las ventas, etc., pero como regla general, un presupuesto publicitario adecuado suele estar conformado por el 3% de las ventas.

5. Seleccionar medios publicitarios

Una vez que se ha determinado el presupuesto publicitario, el siguiente paso consiste en seleccionar los medios o canales publicitarios que se utilizarán para enviar el mensaje publicitario al público objetivo.

Algunos de los principales medios o canales publicitarios son:

  • Televisión: medio costoso, pero de amplio alcance.
  • Radio: medio también costoso, pero con una alta frecuencia de exposición del mensaje.
  • Prensa escrita: incluye diarios, revistas y publicaciones especializadas.
  • Medios publicitarios exteriores: incluyen letreros, carteles, afiches, paneles y vallas publicitarias.
  • Internet: implica el alquiler de espacios publicitarios en sitios web de terceros, el envío de mensajes publicitarios vía correo electrónico, y la publicación de contenido en redes sociales.
  • Teléfono: implica la realización de llamadas telefónicas en donde se ofrecen los productos o servicios.
  • Correo postal: implica el envío de anuncios o mensajes publicitarios vía correo postal.
  • Ferias: implica el alquiler de puestos o stands en ferias locales o internacionales.
  • Materiales publicitarios impresos: incluyen folletos, catálogos, volantes, tarjetas de presentación y calendarios.
  • Artículos de merchandising: lapiceros, llaveros, cartucheras, destapadores, gorros y camisetas que llevan consigo el logo, la marca o el nombre de la empresa.

Para la elección de los medios publicitarios se debe tomar en cuenta el presupuesto publicitario, pero también las características del público objetivo; por ejemplo, si este está conformado por jóvenes que suelen utilizar las redes sociales, se debería utilizar estas como medio publicitario.

6. Redactar mensaje publicitario

Una vez que se han seleccionado los medios publicitarios que se utilizarán, se procede a redactar el mensaje publicitario que se enviará al público objetivo a través de dichos medios con el fin de alcanzar los objetivos publicitarios.

Para redactar el mensaje publicitario se debe tomar en cuenta los objetivos publicitarios, y las características del público objetivo; por ejemplo, si este le da prioridad a una determinada característica del producto, se debería resaltar dicha característica en el mensaje.

Asimismo, para que sea un mensaje efectivo debe señalar las principales características y beneficios del producto, ser atractivo y persuasivo, tener un lenguaje claro y fluido, y ser corto y conciso.

7. Hacer efectiva la publicidad

Una vez que se ha redactado el mensaje publicitario, se procede a enviarlo al público objetivo a través de los medios publicitarios previamente seleccionados; es decir, se hace efectiva la publicidad.

Por ejemplo, se publica un anuncio en el diario, se alquila un panel publicitario, se sube un video promocional a Internet, se envía un mensaje publicitario vía correo electrónico, se activa una campaña publicitaria en redes sociales, etc.

8. Evaluar resultados

Finalmente, una vez que se ha hecho efectiva la publicidad, se procede a medir y evaluar los resultados obtenidos, y comprobar que se hayan cumplido los objetivos propuestos para que, en caso de no ser así, tomar las medidas correctivas.

Por ejemplo, en caso de no haber alcanzado los objetivos propuestos, se podría tomar la decisión de realizar un mejor análisis del público objetivo, aumentar el presupuesto publicitario, cambiar los medios publicitarios utilizados, mejorar el mensaje publicitario, etc.

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Hacer publicidad no necesariamente es lo mismo que hacer una campaña publicitaria. En una campaña publicitaria también se seleccionan medios publicitarios y se diseñan anuncios publicitarios, pero la diferencia radica en que una campaña publicitaria se planifica y se ejecuta lo planificado durante un determinado periodo de tiempo, mientras que en la publicidad no siempre hay una planificación.

Tipos de publicidad

La publicidad suele clasificarse según el medio publicitario utilizado; por ejemplo, existe la publicidad en televisión, en radio, en diarios y en redes sociales; sin embargo, existen algunos tipos de publicidad que no entran en esta clasificación y que vale la pena mencionar.

Publicidad below the line (BTL)

La publicidad below the line (BTL) es un tipo de publicidad que, a diferencia de la publicidad above the line (ATL) que utiliza medios convencionales tales como la televisión y la radio para llegar a un público amplio y general, utiliza medios no convencionales para llegar a un público específico de manera directa y personalizada.

La publicidad BTL busca interactuar con el consumidor y obtener una respuesta inmediata a través de degustaciones, demostraciones de productos, exhibiciones, y eventos deportivos y culturales.

Publicidad exterior

La publicidad exterior es un tipo de publicidad que utiliza medios tales como letreros, carteles, afiches, paneles, vallas publicitarias y otros elementos ubicados en la vía pública.

Este tipo de publicidad permite llegar a un público amplio, pero a la vez específico conformado por personas que viajan en automóviles y vehículos de transporte público, o que suelen transitar por la zona en donde está ubicado el medio publicitario, así como tener un buen impacto visual en el público y recordarle constantemente el producto o la marca.

Publicidad no pagada

La publicidad no pagada, también conocida como publicidad orgánica o publicidad gratuita, es cualquier tipo de publicidad que se realiza sin necesidad de tener que pagar por esta.

Además de permitir llegar a un público de manera gratuita, muchas veces con una igual o mayor efectividad a una pagada, otras características de este tipo de publicidad es que suele tomar tiempo en obtener resultados, pero una vez que los obtiene puede seguir generando resultados continuamente.

Algunos ejemplos de publicidad no pagada son los auspicios de personas, instituciones o empresas, y creación de contenido en páginas web, blogs, plataformas de video y redes sociales.

Publicidad boca a boca

La publicidad boca a boca es un tipo de publicidad no pagada en donde se busca que los consumidores recomienden el producto o servicio por su propia cuenta.

Este tipo de publicidad permite generar confianza y credibilidad en los consumidores, ya que estos suelen confiar y creer más en lo que les digan otros consumidores que en lo que les diga la empresa que les vende los productos.

La publicidad boca a boca se da al ofrecer un producto de muy buena calidad, ofrecer un excelente servicio al cliente, crear una buena reputación, o publicar contenido capaz de convertirse en viral y ser compartido por varios usuarios.

Consejos para una publicidad efectiva

Para finalizar este artículo, te presentamos a continuación una lista conformada por 10 consejos que te ayudarán a hacer una publicidad efectiva; es decir, una publicidad que te permitirá alcanzar tus objetivos publicitarios u obtener los resultados esperados.

1. Ten en cuenta tu público objetivo

No todos los públicos tienen acceso a los mismos medios publicitarios, ni reaccionan por igual ante el mismo mensaje, por lo que al definir y conocer bien al público objetivo es posible diseñar estrategias publicitarias más efectivas.

Antes de hacer publicidad o lanzar tu campaña publicitaria identifica y analiza los medios que más utiliza tu público objetivo, la hora en que más los usan, lo que más valoran de tu producto o servicio, y toda la información que te permita elegir los medios que le sean más accesibles, y redactar el mensaje que mayor impacto pueda tener en él.

2. Haz publicidad de buena calidad

Una publicidad de buena calidad proyecta la imagen de un producto o servicio de buena calidad, mientras que una publicidad de mala calidad proyecta la imagen de un producto o servicio pobre y descuidado.

Una publicidad de buena calidad no necesariamente tiene que ser costosa, sino que, independientemente del medio que utilice, cuente con elementos de buena calidad, por ejemplo, una página web con un diseño profesional, folletos con un diseño atractivo y profesional, y hechos de un buen material, y anuncios atractivos y con una redacción impecable.

3. Dales prioridad a las imágenes

La publicidad entra más que todo por los ojos, por lo que mientras más imágenes tenga un anuncio publicitario y más atractivas sean estas, más llamará la atención y mayor impacto tendrá en los consumidores.

Por tanto, asegúrate siempre de incluir en tu anuncio fotografías, ilustraciones o gráficos que te ayuden a reforzar el mensaje del anuncio y llamar la atención del público.

Como dato, según estudios de percepción, lo que más llama la atención en lo que a la publicidad se refiere, son imágenes con mensajes positivos y que estén conformadas por fotografías antes que por dibujos.

4. Usa un lema publicitario

Contar con un lema publicitario permite resaltar una característica importante del producto o servicio ofrecido (por ejemplo, en el lema «precios más bajos siempre», se comunica a los consumidores que los precios son los más bajos del mercado, y que así permanecerán) y, a la vez, captar a los consumidores que buscan exclusivamente dicha característica.

Siempre que te sea posible crea e incluye un lema publicitario en tu publicidad, el cual debe ser corto, claro, original e ingenioso, y relacionar tu producto o servicio con alguna característica, atributo o beneficio que quieras resaltar.

5. Sé sincero con lo que ofreces

Cuando un cliente no llega a recibir lo que se le prometió a través de la publicidad, no solo deja de ser cliente de la empresa que faltó a su promesa, sino que también empieza a hablar mal de esta, y hasta puede que opte por denunciarla ante las autoridades.

Antes de ofrecer algo a través de la publicidad, asegúrate de que realmente cuentas con ello o de que serás capaz de cumplirlo, de que serás capaz de producir lo suficiente como para poder atender la posible demanda que genere, y de que podrás hacerlo de un modo constante.

6. Genera confianza

Con tantos productos y servicios ofertados en el mercado, y tantas malas experiencias que han tenido con estos, los consumidores de hoy no compran o adquieren un producto o servicio si no tienen confianza en la empresa que los provee, por lo que de nada sirve contar con el mejor producto o servicio si la publicidad no les genera la suficiente confianza como para que los adquiera.

Para generar confianza incluye en tu publicidad imágenes de tu empresa, tu experiencia en el mercado, tus logros obtenidos, testimonios de clientes satisfechos, una relación de tus principales clientes (especialmente si se tratan de clientes conocidos), una relación de tus proveedores (en caso de tratarse de proveedores reconocidos), y certificados que garanticen y den fe de la calidad de tus productos o servicios tales como los certificados ISO.

7. Haz publicidad en el momento oportuno

Teniendo en cuenta que los consumidores tienen diferentes hábitos y costumbres, habrá momentos en que un mensaje publicitario les llegará o impactará más, y otros en que prácticamente no tendrá ningún efecto en ellos.

Por tanto, haz publicidad o lanza tu campaña publicitaria en el momento oportuno y no en cualquier momento, espera hasta que tu producto haya creado suficiente expectativa antes de darlo a conocer, y espera el momento en que tu público tenga un mayor acceso al medio publicitario que vas a utilizar.

Por ejemplo, si decides anunciar tu restaurante en un diario, publica tu anuncio los días de la semana en que el diario publica un suplemento o una sección de comida, si vas a anunciar en la radio hazlo en las horas en que tu público la escuche más, y si vas a repartir volantes hazlo en las horas en que tu público transite más por la zona en donde lo vas a hacer.

8. Haz publicidad constantemente

Para que la publicidad sea efectiva, no basta con hacer publicidad o lanzar una campaña publicitaria una sola vez y luego olvidarse del tema, sino que esta debe repetirse varias veces y de forma periódica, ya que es necesario hacerle recordar los productos o servicios a los consumidores, y estimularlos para que los adquieran constantemente.

Por ejemplo, si decides anunciar en el diario, no debes publicar tu anuncio una sola vez o hacerlo de vez en cuando, sino que debes publicarlo varias veces y de forma periódica (por ejemplo, una vez a la semana durante dos o tres meses).

Como dato, se estima que para poder grabar un mensaje en la mente del consumidor, este lo debe escuchar o leer tres veces alternadamente en diferentes medios, durante un periodo de una semana como mínimo.

9. Prueba y evalúa varias veces

Cuando una empresa decide hacer publicidad, lo más probable es que la mayoría de los anuncios o medios publicitarios que utilice no tengan buenos resultados, y que tenga que probar varios anuncios en diferentes medios antes de encontrar una combinación que realmente funcione.

Cuando empieces a hacer publicidad ten en cuenta esto y prueba y evalúa una y otra vez diferentes estrategias publicitarias hasta encontrar la adecuada. No te quedes estancado en la primera estrategia que utilices, sino que prueba con varias hasta encontrar la que te genere el mejor rendimiento.

10. Empieza en pequeña escala

Teniendo en cuenta que cuando se empieza a hacer publicidad, la mayoría de los anuncios o medios que se utilicen no tendrán buena respuesta en los consumidores, es recomendable empezar en pequeña escala antes de hacerlo en grande.

Empieza con un pequeño presupuesto hasta encontrar el anuncio o medio que te genere suficientes ingresos como para justificar los costos; por ejemplo, si estás pensando publicar un anuncio en un diario importante, empieza mejor por publicarlo en alguna publicación vecinal de tal manera que puedas medir antes su efectividad.

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