Qué vender en Internet
Una forma común de iniciar un negocio en Internet, o de simplemente empezar a ganar dinero en Internet, es vendiendo algún producto en Internet.
En Internet podemos vender prácticamente cualquier tipo de producto, sólo es cuestión de que el cliente nos haga el pedido, cancele vía tarjeta de crédito o a través de cualquier otra forma de pago (vía depósito bancario, vía transferencia bancaria, etc.), y que luego le enviemos el producto a su dirección física, o que pueda descargarlo a través de algún sitio web.
Sin embargo, vender por Internet no es lo mismo que vender a través de los medios tradicionales, razón por la cual algunos productos pueden llegar a tener mucha demanda, mientras que otros es poco probable que alguien decida comprarlos a través de este medio.
Básicamente, existen dos tipos de productos que se suelen vender por Internet: los productos digitales y los productos físicos. Veamos a continuación cada uno de estas alternativas, así como algunos consejos relacionados:
1. Productos digitales
Los productos digitales que más se venden en Internet son los productos digitales basados en la información (infoproductos), de los cuales los principales son los softwares (programas informáticos) y los ebooks (libros electrónicos); aunque también se suelen vender audios, videos, plantillas web, etc.
La ventaja de vender productos digitales es que estos productos no tienen que ser enviados físicamente al cliente, sino que éste, una vez realizado el pago correspondiente, puede proceder a descargarlos desde un sitio web, lo cual nos permite evitar costos de envío, y además le da la posibilidad al cliente de obtener su producto inmediatamente.
Estos productos digitales pueden ser creados por nosotros mismos, pueden ser productos digitales de terceros, o pueden ser productos digitales con derecho de reventa. Veamos cada una de estas alternativas:
Productos digitales propios
Productos digitales propios son productos digitales creados por nosotros mismos. A menos que seamos buenos programadores, lo más sencillo en este caso es crear o escribir un ebook.
Par ello, no es necesario que seamos grandes escritores, simplemente basta con que tengamos experiencia, conocimientos y pasión por algún tema en particular.
Tampoco es necesario tener que escribir una gran obra, una novela o un ebook de 200 páginas, simplemente basta con que escribamos un manual práctico, una guía, un curso, un cuento, un poemario, un recetario, etc.
Por ejemplo, si tenemos experiencia en el adiestramiento de perro, podríamos escribir un ebook sobre cómo adiestrar perros. O, por ejemplo, si nos apasiona el tema de los negocios, podríamos escribir un ebook sobre cómo iniciar y administrar un negocio rentable.
Si para empezar a vender por Internet nos decidimos por esta alternativa de vender nuestro propio ebook, un consejo es que al crearlo o escribirlo, nos concentremos en el que será nuestro público objetivo, procurando crear un producto que realmente le sea se ayuda. Otro consejo es que nos tomemos nuestro tiempo al momento de elegir el título, pues de éste dependerá mucho el éxito de nuestro ebook.
Productos digitales de terceros
Productos digitales de terceros son productos digitales creados por otras personas, lo cuales podemos vender, generalmente, al suscribirnos previamente a algún programa o sistema de afiliados.
Una vez suscrito en un sistema de afiliados, cada vez que logremos vender un producto, recibimos una comisión o un porcentaje de la venta, comisión que puede variar dependiendo del sistema de afiliados o del producto, pudiendo ir desde un 5% a un 75%. Algunos sistemas de afiliados conocidos son los de Amazon y ClickBank.
Si para empezar a vender por Internet nos decidimos por esta alternativa de suscribirnos a algún sistema de afiliados y vender productos digitales de terceros, un consejo que es antes de decidirnos por algún sistema de afiliados, nos informemos bien sobre dicho sistema, busquemos referencias, y analicemos si los productos que comercializan son realmente de calidad.
Productos digitales con derecho de reventa
Productos digitales con derecho de reventa son productos digitales creados por otras personas, los cuales al comprarlos adquirimos el derecho de poder venderlos sin necesidad de tener que pagar alguna comisión.
Un ejemplo serían los paquetes de ebooks que abundan por la red, los cuales al adquirirlos obtenemos el derecho de vender cualquiera de los ebooks que incluya, todas las veces que queramos, y quedándonos con el total de las ventas.
Tal como en el caso de los sistemas de afiliados, si nos decidimos por esta opción para empezar a vender por Internet, debemos procurar que los productos a revender sean de buena calidad.
Ya sea que elijamos crear nuestros propios productos digitales, nos suscribamos a algún sistema de afiliado, o vendamos productos digitales con derecho de reventa, en cuanto a dónde vender estos productos, podemos crear nuestra propia página web o tienda virtual, venderlos en marketplaces o sitios de subasta tales como eBay y MercadoLibre, venderlos a través del uso del email marketing o, en el caso de los productos digitales propios, venderlos en sitios especiales que se encargan de ayudarnos con dicha tarea tales como Lulu y ClickBank.
2. Productos físicos
La otra alternativa para vender en Internet consiste en vender productos físicos, entre los que destacan las prendas de vestir, los discos, los licores, las artesanías, las joyas, los regalos, los adornos, etc. Productos los cuales podemos crear o producir nosotros mismos, o comprarlos previamente a algún proveedor.
A diferencia de los productos digitales, los productos físicos deben ser enviados al cliente una vez que éste haya realizado la compra, lo cual nos obliga a incurrir en gastos de envío, y a consumir trabajo y tiempo.
Ahora bien, no todos los productos físicos tienen la misma acogida en Internet, algunos pueden llegar a tener una alta demanda, mientras que otros es probable que nadie quiera comprarlos.
Básicamente, existen dos tipos de productos físicos que suelen tener éxito en Internet: los productos seguros y los productos originales. Veamos cada uno de ellos:
Productos seguros
Si recién empezamos a vender a Internet, debemos procurar que nuestro producto físico sea un producto seguro, es decir, un producto que el cliente tenga la seguridad de que una vez que lo tenga en sus manos, no se sentirá decepcionado o insatisfecho. Por ejemplo, si un cliente compra un libro en Internet, una vez que lo tenga en sus manos es poco probable que tenga alguna insatisfacción, reclamo o queja con el que le vendió el libro; en cambio, si comprara una prenda vestir, una vez que la tenga en sus manos es posible que la prenda no le quede bien, o que no le guste la textura de la tela, quedando insatisfecho por la compra.
Una vez que hayamos vendido nuestros productos seguros y haber creado suficiente confianza en los consumidores, recién podemos proceder a vender otros tipos de productos (que fue precisamente la estrategia que utilizó Amazon que empezó vendiendo sólo libros, y luego toda clase de productos).
Productos originales
Otro tipo de producto que tiene buena acogida en Internet son los productos originales y poco comunes, es decir, los productos novedosos que no se suelen encontrar en los mercados físicos. Un ejemplo de productos originales, podrían ser los accesorios para mascotas, tales como casas, jaulas, camas, ropa, disfraces o juguetes para mascotas.
Otro ejemplo de productos originales podrían ser los productos propios de un país o región, que los consumidores no encuentren en los países o regiones en donde vivan. Un ejemplo de estos productos podrían ser las artesanías locales.