¿Qué es una empresa? (definición, importancia, funciones y tipos)
Una empresa es una entidad dedicada a realizar actividades de extracción de recursos, producción de productos, comercialización de productos o prestación de servicios, con el fin de obtener un beneficio económico.
Las empresas pueden ser de diferentes tamaños, desde pequeñas empresas unipersonales hasta grandes corporaciones multinacionales, operar en diversos sectores como la agricultura, la industria alimentaria y los servicios de transporte, y adoptar diversas formas jurídicas como una sociedad colectiva y una sociedad anónima.
En este artículo te decimos qué es una empresa, cuál es su importancia, cuáles son sus funciones y qué tipos de empresas existen.
Las empresas cumplen un papel fundamental en el desarrollo económico y social ya que generan empleo, fomentan la innovación y mejoran la calidad de vida de las personas.
En este artículo encontrarás:
¿Qué es una empresa?
Una empresa es una entidad creada por una o más personas, y conformada por elementos humanos, materiales y financieros, dedicada a realizar actividades de extracción de recursos, producción de productos, comercialización de productos o prestación de servicios, con el fin de obtener un beneficio económico.
Los elementos humanos, materiales y financieros con los que suele contar una empresa son los siguientes:
- Elementos humanos: las personas que trabajan en o para la empresa. Incluye los directivos de la empresa, los gerentes, los administradores, los operarios, los vendedores, etc.
- Elementos materiales: los activos tangibles que posee la empresa. Incluye las máquinas, los equipos y las herramientas necesarias para extraer los recursos, producir los productos, comercializar los productos, o prestar los servicios, las edificaciones, el mobiliario, los vehículos, las materias primas o insumos, las mercaderías, etc.
- Elementos financieros: el dinero y los activos financieros que posee la empresa. Incluye el dinero en efectivo que la empresa tiene destinado para el pago de facturas, impuestos, sueldos, servicios de electricidad y agua, etc., y los activos financieros tales como acciones y bonos que posee.
Además de los mencionados, otros elementos que se suelen encontrar en toda empresa son: objetivos, estrategias, visión, misión, valores, tecnología, conocimientos e información necesaria para competir con otras empresas.
Una empresa también se define como una acción o tarea que requiere cierto esfuerzo (un ejemplo de uso sería: «iniciar y sacar adelante un negocio es una empresa difícil, pero no imposible»); sin embargo, teniendo en cuenta el carácter de este sitio, en este artículo desarrollaremos la definición de empresa como entidad dedicada a realizar actividades de extracción de recursos, producción de productos, comercialización de productos o prestación de servicios.
Importancia de una empresa
Desde pequeñas empresas familiares hasta grandes corporaciones multinacionales, las empresas cumplen un rol fundamental en el desarrollo económico y social del país o la localidad en donde operan, ya que generan empleo, impulsan el crecimiento económico, fomentan la innovación y el desarrollo tecnológico, promueven la sostenibilidad ambiental, y mejoran la calidad de vida de las personas.
- Generan empleo: las empresas crean puestos de trabajo y, por tanto, generan empleo, mejorando así la situación económica y el nivel de vida de las personas; pero además, a medida que crecen y contratan a más trabajadores contribuyen con la reducción del desempleo y la pobreza.
- Impulsan el crecimiento económico: las empresas impulsan el crecimiento de la economía ya que además de mejorar la situación económica y, por tanto, el poder adquisitivo de las personas, fomentan el intercambio de dinero por productos y servicios, y contribuyen con el pago de impuestos.
- Fomentan la innovación y el desarrollo tecnológico: muchas empresas fomentan la innovación y el desarrollo tecnológico al invertir en la investigación y el desarrollo de nuevos productos, e incentivar la competencia con otras empresas por crear los mejores productos y servicios.
- Promueven la sostenibilidad ambiental: muchas empresas promueven la sostenibilidad ambiental al implementar prácticas que buscan reducir su impacto ambiental, y establecer programas que buscan sensibilizar y educar a sus trabajadores, clientes y sociedad en general sobre la importancia de cuidar y proteger el medio ambiente.
- Mejoran la calidad de vida de las personas: las empresas mejoran el nivel de vida de las personas ya que además de generar empleo, proveen productos y servicios que que satisfacen necesidades, gustos y preferencias, y resuelven problemas de las personas y, en muchos casos, contribuyen con la educación y la cultura.
Funciones de una empresa
Para entender mejor el concepto de empresa veamos a continuación las principales funciones que suele tener toda empresa.
- Extraer recursos, producir productos, comercializar productos o prestar servicios: dependiendo del tipo de empresa que sea según su actividad, la principal función de una empresa es la de extraer recursos de la naturaleza, producir o fabricar productos, comercializar productos, o prestar servicios.
- Mejorar la economía de la localidad: en mayor o menor medida, toda empresa mejora la economía de la localidad en donde opera ya que promueve el intercambio de dinero por productos y servicios (al vender productos y servicios, y permitirles a sus dueños y trabajadores ganar dinero con el que pueden adquirir productos y servicios de otras empresas); pero también debido a que contribuye con el pago impuestos.
- Contribuir con el bienestar de la sociedad: una empresa también contribuye con el bienestar de las personas de la localidad en donde opera ya que proveen productos y servicios que satisfacen necesidades, gustos y preferencias, y resuelven problemas de las personas; pero también debido a que generan empleo.
- Generar beneficios económicos: finalmente, a menos que se trate de una empresa sin fines de lucro, una empresa tiene como principal objetivo generar beneficios económicos, básicamente a través de la venta de productos o la prestación de servicios, ya sea a personas o a otras empresas.
Tipos de empresas
Las empresas suelen clasificarse según diversos criterios tales como su actividad, su tamaño, su forma jurídica, la procedencia de su capital, su ámbito de actividad, y el destino de sus beneficios.
Según su actividad
La principal clasificación que se le realiza a una empresa es según la principal actividad a la que se dedica, pudiendo ser:
- Extractiva: cuando se dedica a extraer recursos renovables o no renovables de la naturaleza. Por ejemplo, en el caso de una empresa agrícola, una empresa ganadera, una empresa pesquera, una minera, una maderera, etc.
- Productora o manufacturera: cuando se dedica a producir o fabricar productos; es decir, transformar insumos o materias primas en productos que posteriormente son destinados para la venta (productos terminados). Por ejemplo, en el caso de una empresa productora de alimentos, una empresa fabricante de muebles, una empresa de confecciones, etc.
- Comercial: cuando se dedica a la comercialización de productos; es decir, a la compra y posterior venta de productos terminados. Por ejemplo, en el caso de una empresa dedicada a la venta de artefactos eléctricos, una empresa dedicada a la venta de repuestos de autos, etc.
- De servicios: cuando se dedica a brindar determinados servicios a las personas o a otras empresas. Por ejemplo, en el caso de una empresa de transporte, una empresa de turismo, una empresa de seguros, etc.
Según su tamaño
No existe un consenso al momento de determinar cuándo una empresa es grande o pequeña; sin embargo, una clasificación común de una empresa según su tamaño suele ser la siguiente:
- Microempresa: cuando posee menos de 10 trabajadores, ingresos anuales hasta US$50,000, activos fijos hasta US$20,000, y ventas anuales hasta US$40,000.
- Pequeña empresa: cuando posee entre 10 a 40 trabajadores, ingresos anuales hasta US$1’000,000, activos fijos hasta US$300,000, y ventas anuales hasta US$750,000.
- Mediana empresa: cuando posee entre 40 a 100 trabajadores (ello en América Latina, en la Unión Europea 200, en Estados Unidos 500, y en Japón 300).
- Gran empresa: cuando los criterios superan los valores anteriores.
Cuando se habla de las MYPEs se hace referencia al conjunto de las micro y pequeñas empresas, y cuando se habla de las PYMEs se hace referencia al conjunto de las pequeñas y medianas.
Según su forma jurídica
La clasificación de una empresa según su forma jurídica se realiza para efectos legales, y varía de acuerdo al país en el que se encuentre; sin embargo, una clasificación común de una empresa según su forma jurídica es la siguiente:
- Empresa individual: cuando posee un solo dueño. Una empresa individual a su vez puede ser una Empresa Unipersonal, cuando el dueño asume todas las obligaciones de la empresa a título personal y de forma ilimitada, o una Empresa Individual de Responsabilidad Limitada, cuando las obligaciones de la empresa se limitan a los bienes que esta posea.
- Empresa societaria o sociedad: cuando posee varios dueños o socios, los cuales comparten los derechos y las obligaciones de la empresa. Una empresa societaria o sociedad a su vez puede ser una Sociedad Colectiva, una Sociedad Comanditaria, una Sociedad Comercial de Responsabilidad Limitada, o una Sociedad Anónima.
Según la procedencia de su capital
Otra clasificación común es la que se realiza en base a la procedencia o propiedad de su capital, pudiendo ser:
- Empresa pública: cuando su capital proviene del Estado. Su principal objetivo es contribuir con el bienestar de los ciudadanos. Por ejemplo, en el caso de una empresa dedicada a brindar educación gratuita, una empresa dedicada a brindar el servicio de electricidad, una empresa dedicada a brindar el servicio de agua potable, etc.
- Empresa privada: cuando su capital proviene de individuos particulares. Su objetivo principal es obtener un beneficio económico.
- Empresa mixta: cuando su capital proviene tanto del Estado como de individuos particulares.
Según su ámbito de actividad
Una empresa también se suele clasificar según el ámbito geográfico en el que realizada sus actividades, pudiendo ser:
- Empresa local: cuando su ámbito de actividad se limita a la localidad en la que se encuentra; por ejemplo, a un pueblo, a una ciudad, etc.
- Empresa provincial: cuando su ámbito de actividad se limita a una provincia o estado.
- Empresa regional: cuando opera en varias provincias o estados de una región.
- Empresa nacional: cuando opera en varias regiones de un país.
- Empresa multinacional: cuando sus actividades se extienden a varios países.
Según el destino de sus beneficios
Finalmente, una empresa puede clasificarse también según el destino que le da a sus beneficios económicos, pudiendo ser:
- Empresa sin fines de lucro: cuando sus beneficios económicos se reinvierten en la propia empresa para permitir su crecimiento. Su principal objetivo es contribuir con el bienestar de la sociedad. Por ejemplo, en el caso de una empresa dedicada a brindar educación gratuita, una empresa religiosa, una empresa de beneficencia, etc.
- Empresa con fines de lucro: cuando los beneficios económicos se destinan en parte al crecimiento de la empresa, y en parte a los dueños o inversionistas de esta. Su principal objetivo es obtener un beneficio económico.