¿Qué es un negocio? (definición, tipos y diferencia con una empresa)

Un negocio puede ser una actividad, ocupación, sistema o método que tiene como finalidad obtener un beneficio económico (por ejemplo, la compra y venta de ropa); pero también una entidad dedicada a obtener un beneficio económico (por ejemplo, una tienda de ropa).

Los negocios son fundamentales para el desarrollo económico y social de todo país ya que generan empleo al crear puestos de trabajo, fomentan la innovación, contribuyen con el pago de impuestos y mejoran la calidad de vida de las personas.

En este artículo te decimos qué es un negocio, cuál es la diferencia entre un negocio y una empresa, cuáles son los diferentes tipos de negocios que existen, cuáles son los requisitos que debe cumplir un negocio para ser exitoso, y cuáles son los principales mitos que existen sobre los negocios.

Los negocios son fundamentales para el desarrollo de un país ya que contribuyen con el crecimiento económico de este.

¿Qué es un negocio?

Un negocio es una actividad, ocupación, sistema o método que tiene como finalidad obtener un beneficio económico, generalmente a través de la realización de actividades de producción de productos, comercialización de productos o prestación de servicios, que benefician a las personas u a otros negocios.

En este caso, ejemplos de negocios son una página web en donde se brinda información gratuita y se genera ingresos a través de la colocación de anuncios publicitarios, la compra de una casa y su posterior alquiler, y la compra de ropa en un mercado mayorista y su posterior venta en una tienda de ropa.

Pero también, un negocio es una entidad creada con el fin de obtener un beneficio económico, generalmente a través de la realización de actividades de producción de productos, comercialización de productos o prestación de servicios, que benefician a las personas u a otros negocios.

En este caso, ejemplos de negocios son una fábrica de automóviles (negocio dedicado a la producción de productos), una tienda de repuestos de automóviles (negocio dedicado a la comercialización de productos), y un taller de mecánica automotriz (negocio dedicado a la prestación de servicios).

Diferencia entre un negocio y una empresa

La diferencia entre un negocio y una empresa es que una empresa también es una entidad creada con el fin de obtener un beneficio económico, pero no una actividad, ocupación, sistema o método.

Es decir, aunque en ocasiones se utiliza el término negocio solo cuando se trata de una pequeña empresa, tal como una tienda de ropa, un restaurante o un taller de confección, y no cuando se trata de una empresa grande tal como una fábrica de automóviles o una empresa de telefonía, lo cierto es que un negocio y una empresa son lo mismo según la segunda definición que dimos de un negocio.

Para entender mejor la diferencia que existe entre un negocio y una empresa supongamos el caso de una persona que se dedica a comprar ropa al por mayor en un mercado mayorista, y luego venderla al menudeo en una tienda de ropa.

En este caso la actividad de comprar la ropa y luego venderla es un negocio, ya que es una actividad que tiene como finalidad obtener un beneficio económico; mientras que la tienda de ropa también es un negocio, pero también una empresa, ya que es una entidad dedicada a obtener un beneficio económico.

Tipos de negocios

Existen diversos tipos de negocios ya que estos suelen clasificarse según diversos criterios, tales como su tamaño, su forma jurídica y su ámbito de operaciones; sin embargo, la principal clasificación que se les suele dar a los negocios es según su principal actividad.

A continuación los principales tipos de negocios que existen según su principal actividad:

Negocios extractivos

Los negocios extractivos son negocios dedicados a la extracción de recursos naturales, ya sean renovables o no renovables.

Estos negocios suelen ser medianos o grandes, y contar con varios recursos materiales conformados principalmente por máquinas y equipos necesarios para realizar sus actividades de extracción.

Ejemplos de negocios extractivos son las empresas agrícolas, las empresas ganaderas, las empresas pesqueras, las empresas mineras, las empresas madereras, las empresas petroleras, etc.

Negocios productores o de manufactura

Los negocios productores o de manufactura son negocios dedicados a la producción o fabricación de productos; es decir, a la transformación de materias primas o insumos en productos destinados a la venta (productos finales).

Estos negocios igualmente suelen ser medianos o grandes, y contar con varios recursos materiales conformados principalmente por máquinas y equipos necesarios para realizar sus actividades de producción.

Ejemplos de negocios productores son las fábricas de automóviles, las fábricas de alimentos, las fábricas de muebles, las fábricas textiles, etc.

Negocios de ventas al por menor

Los negocios de ventas al por menor o negocios minoristas son negocios dedicados a la compra de productos en cantidad, y su posterior venta al menudeo.

Como principales características, estos negocios suelen contar con un almacén físico en donde se almacena un inventario, y un local en donde se ofrecen y promocionan los productos al público.

Ejemplos de negocios minoristas son las tiendas de ropa, las tiendas de electrodomésticos, las tiendas de repuestos de automóviles, las ferreterías, las bodegas, los bazares, las farmacias, etc.

Negocios de ventas al por mayor

Los negocios de ventas al por mayor o negocios mayoristas son negocios que actúan como intermediarios entre los negocios productores y los negocios de ventas al por menor.

Estos negocios primero les compran productos en cantidad a los primeros, y posteriormente se los venden, también en cantidad, a los segundos.

Ejemplos de negocios mayoristas son las distribuidoras de bebidas, las distribuidoras de alimentos, las distribuidoras de materiales de construcción, etc.

Negocios de servicios

Los negocios de servicios son negocios dedicados a la prestación de determinados servicios, ya sea a las personas o a otros negocios o empresas.

Estos negocios suelen contar con recursos materiales conformados principalmente por equipos necesarios para brindar los servicios, y recursos humanos conformados por trabajadores dedicados también a brindarlos.

Ejemplos de negocios de servicios son los restaurantes, los hoteles, los salones de belleza, los gimnasios, los centros médicos, los estudios de abogados, las agencias de viaje, las inmobiliarias, los bancos, los colegios, las empresas de transporte, las empresas de consultoría, los talleres de confección, etc.

Negocios online

Finalmente están los negocios online o negocios en Internet, los cuales son negocios que operan o se realizan exclusivamente a través de Internet.

Además de operar o realizarse a través de Internet, otras características de estos negocios son que suelen contar con un sitio web y, a diferencia de otros tipos de negocios, no suelen contar con un local en donde producir o vender productos, o brindar servicios.

Ejemplos de negocios online son las páginas web o blogs que generan ingresos a través de la colocación de anuncios publicitarios, las tiendas online, los programas de afiliados, etc.

Requisitos para un negocio exitoso

Hoy en día, con tantos competidores que existen en el mercado, llegar a tener un negocio exitoso no es una tarea sencilla, pero tampoco es una tarea imposible si se cumplen algunos requisitos.

A continuación los requisitos que debe cumplir todo negocio para ser exitoso:

Ofrecer un producto de muy buena calidad

Hoy en día, en donde los consumidores son cada vez más exigentes, el principal requisito que debe cumplir un negocio para ser exitoso es ofrecer un producto de muy buena calidad.

Un producto de muy buena calidad podría implicar, entre otras cosas, un producto que utilice o esté hecho de insumos de primera, que tenga un diseño atractivo, que sea durable en el tiempo, y que cumpla a cabalidad las funciones para las cuales fue creado.

Brindar un excelente servicio al cliente

Además de ser exigentes, a los consumidores les gusta que los engrían, y no tienen problemas en irse a la competencia si sienten que los han tratado mal, por lo que de nada sirve ofrecer un producto de muy buena calidad si este no está acompañado de un excelente servicio al cliente.

Brindar un excelente servicio al cliente podría implicar, entre otras cosas, brindar un trato amable, brindar una rápida atención, brindar un trato personalizado siempre que sea posible, contar con un ambiente agradable que haga que el cliente se sienta a gusto, etc.

Contar con una diferenciación

Para poder destacar ante tantos competidores, otro requisito que debe cumplir un negocio es contar con una diferenciación; es decir, con algo único y novedoso que le permita distinguirse de los demás.

Una diferenciación podría ser, por ejemplo, una función del producto que los demás productos de la competencia no poseen, un servicio extra que los demás negocios competidores no ofrecen, un sistema de toma de pedidos o entrega del producto más eficiente, etc.

Innovar constantemente

Hoy en día, en donde el ciclo de vida de los productos es cada vez más corto, para que un negocio sea exitoso otro requisito importante que debe cumplir es innovar constantemente.

Innovar constantemente implica crear y lanzar al mercado constantemente nuevos productos (que no necesariamente tienen que ser totalmente nuevos, sino que también podrían ser productos con los que ya se cuenta, pero con nuevas características); pero también crear y aplicar constantemente nuevos procesos de producción, nuevas formas de atender al cliente, nuevas estrategias de promoción, etc.

Mitos sobre los negocios

Los mitos sobre negocios son creencias o ideas erróneas, pero aceptadas como verdades, sobre lo que se puede o no se puede hacer al momento de iniciar un negocio o sacarlo adelante.

Cuando no se llegan a erradicar a tiempo, estos mitos pueden influenciar negativamente en las personas, formando una especie de barrera mental que bloquea su creatividad, limita su capacidad y reduce su motivación, impidiendo así que puedan empezar o desarrollar con éxito sus negocios.

A continuación los principales mitos que existen sobre los negocios:

Hay que esperar la gran oportunidad

Muchas personas esperan encontrar algún día la gran oportunidad o idea de negocio que les permita dar un giro total a la situación económica en la que están y hacerlos ricos o, por lo menos, permitirle alcanzar la libertad financiera; pero lo cierto es que si uno se la pasa esperando dicha gran oportunidad o idea, lo más probable es que esta nunca aparezca.

Para iniciarse en el mundo de los negocios no es necesario esperar la gran oportunidad o idea de negocio, sino simplemente empezar con la buena idea de negocio que se tenga, teniendo en cuenta que el iniciar un negocio no significa que más adelante no se pueda mejorarlo, rediseñarlo o modificarlo y que, al final, la buena idea termine convirtiéndose en un gran negocio

O, en todo caso, que se lleguen a conocer personas o se vivan situaciones que le den más ideas a uno, o que se vuelva más hábil para detectar oportunidades y que, eventualmente, termine encontrando esa gran oportunidad o idea que tanto había estado esperando.

Si se medita lo suficiente se podrá encontrar una buena idea de negocio

Muchas personas piensan que estando en sus oficinas o encerrándose en sus casas, podrán desarrollar su imaginación y creatividad, y de pronto se les ocurrirá una buena idea de negocio.

Puede que este método algunas veces tenga buenos resultados, pero lo cierto es que para encontrar una buena idea de negocio, uno tiene que salir a la calle, visitar los mercados, analizar a los competidores y observar a los consumidores.

El posible alcanzar rápidamente el éxito con un negocio

Muchas personas piensan que alcanzarán rápidamente el éxito con su negocio, que su producto será único e innovador, y que no tendrán competencia alguna; pero lo cierto es que son muy pocas los empresarios que logran alcanzar el éxito en poco tiempo.

Alcanzar el éxito con un negocio es algo que toma tiempo, y que requiere sortear muchas dificultades e imprevistos, tener mucha paciencia y dedicación, levantarse de muchas caídas y aprender de los errores y, en algunos casos, rediseñar el negocio o, incluso, cerrarlo y volver a empezar.

La situación actual no permite hacer negocios

Se suele echarle la culpa a la situación económica, al gobierno o a la sociedad de la imposibilidad de hacer negocios; pero lo cierto es que siempre habrán posibilidades de emprender un negocio.

Algunas condiciones económicas o sociales puede que perjudiquen la creación de ciertos tipos de negocios, pero por otro lado facilitan la creación de otros; por ejemplo, si la situación económica de un país no es buena, es posible aprovechar los costos bajos o invertir en publicidad, aprovechando que lo más probable es que otros negocios no lo estén haciendo.

O, por ejemplo, si en un país se firman tratados que permiten la introducción de productos de bajo costo, puede ser una oportunidad para crear productos de muy buena calidad, aumentar el precio y buscar mercados con un mayor poder adquisitivo.

El empleo es seguro, los negocios no

Muchas personas buscan un empleo que les garantice un sueldo fijo y los beneficios que conlleva, buscan la supuesta seguridad y estabilidad económica que les brinda tener un empleo, y consideran que iniciar un negocio es arriesgado.

Pero lo cierto es que tal vez emprender un negocio conlleva su riesgo, pero hoy en día, debido a la precariedad de los sistemas de pensiones y a la alta tasa de despidos, tener un empleo muchas veces termina siendo más riesgoso que tener un negocio propio.

Se necesita mucho dinero para iniciar un negocio

Muchas personas piensan que se necesita contar con un buen capital para iniciar un negocio, e incluso hay quienes planifican ahorrar unos años parte del dinero que reciben por sus empleos, para recién empezar el negocio con el que tanto sueñan.

Sin embargo, ello parece ser solo una excusa para no aventurarse o arriesgarse a tener un negocio propio ya que lo cierto que muchas de las grandes empresas que existen empezaron siendo pequeños negocios, y que para emprender un negocio, antes que dinero, se necesita creatividad.

Es necesario contar con creatividad para identificar negocios que requieran poca inversión, para encontrar la forma de reducir la inversión de un negocio (por ejemplo, haciendo convenios con otros negocios), y para conseguir el financiamiento que hace falta (por ejemplo, participando en concursos sobre ideas de negocios).