Servicio al cliente en un restaurante
El servicio al cliente es un factor determinante en la consecución del éxito en un negocio, pero parece recabar mayor importancia cuando se trata de un negocio de restaurante.
Veamos a continuación algunos consejos que nos ayudarán a mejorar el servicio al cliente en nuestro restaurante:
Trato amable
Debemos mostrar amabilidad con el cliente bajo cualquier circunstancia.
Siempre debemos saludarlo, darle la bienvenida, mostrarle una sonrisa sincera y darle las gracias.
Siempre debemos mostrarnos serviciales y atentos a cualquier cosa que requiera.
Ante algún reclamo o queja nunca debemos ponernos a discutir con él, y más bien darle la razón, aunque cuando ello no sea posible, decirle amablemente que esta vez no compartimos su posición.
Y siempre debemos procurar ser flexibles y otorgarle algunas concesiones, por ejemplo, cuando nos pida modificar algún plato o menú, o cuando nos pida pagar con otra moneda diferente a la usual.
Mostrar interés
Siempre debemos mostrar interés y ser solícitos con el cliente.
Apenas ingrese al restaurante, sea lo que sea que estemos haciendo, debemos acercarnos a él, darle la bienvenida y seguirlo hasta que tome una mesa.
Luego, inmediatamente, debemos ponerle los cubiertos y darle la carta del menú.
Podemos demorarnos un poco en servirle su pedido, pero si un cliente entra a un restaurante y ve que nadie se le acerca o que no le ponen los cubiertos rápidamente, puede sentirse ignorado y llevarse una muy mala impresión.
Higiene
Basta con que en el piso haya desperdicios o que los baños estén sucios para que se genere rechazo en el cliente y para que probablemente no vuelva a visitarnos.
En el caso de los restaurantes, la higiene o limpieza debe ser obsesiva, debemos evitar cualquier papel en el piso, el comedor debe estar totalmente limpio al igual que la cocina (sobre todo, si puede ser vista por los clientes desde el comedor) y los baños, los cuales deben limpiarse constantemente.
Pero la higiene no solo debe estar presente en el local, sino también en nuestro personal, el cual debe estar siempre bien presentando y aseado, con el uniforme limpio, las uñas recortadas y el cabello corto o amarrado.
Rápida atención
En el caso de los restaurantes la rapidez en la atención también es muy importante.
Una buena comida podría quedar arruinada si el cliente tiene que esperar mucho a que alguien lo atienda, si tiene que esperar demasiado a que le sirvan su plato, si tiene que pedir repetidamente la cuenta, o si tiene que esperar más de lo normal para que le devuelvan su tarjeta de crédito.
La rápida atención empieza por atender inmediatamente al cliente apenas ingrese a nuestro local.
Si estamos ocupados, al menos debemos acercarnos a él y decirle que enseguida lo estaremos atendiendo, invitarlo a que tome asiento y decirle que pronto estaremos con él, o simplemente darle la carta del menú y hacerle saber que hemos notado su presencia y que en cuanto podamos lo vamos a atender.
Y una vez que hayamos tomado su pedido, debemos atenderlo o servirlo con la mayor rapidez posible.
Sin embargo, la rapidez en la atención dependerá del tipo de restaurante que tengamos y del tipo de público al cual va dirigido.
Por ejemplo, si nuestro restaurante es de comida rápida, está basado en menús o está orientado a trabajadores o ejecutivos que salen a almorzar en sus horas de refrigerio, la atención debe ser muy rápida, lo cual además de permitirnos ganar la preferencia de los clientes, nos permitirá desocupar rápidamente las mesas, y poder así atender a un mayor número de clientela.
En caso de que nuestro restaurante sea de tipo familiar o tipo gourmet, podemos demorar un poco la salida de los platos, ya que los clientes que suelen acudir a este tipo de restaurantes, además de la buena comida, buscan pasar un rato agradable; pero igual tampoco debemos exagerar, siempre debemos recordar que no hay nada más molesto para un cliente en un restaurante que tener que esperar demasiado por su pedido.